Días fríos y despejados nos invitan a salir a pasear. Muchas son las propuestas al alcance de cualquier madrileño, porque está claro que aquí todos somos de Madrid, ya seamos naturales o importados, esta ciudad es de todos. Pues bien, para estos días frescos de sol radiante es obligado salir a estirar las piernas por el Retiro.
Pasear, respirar y disfrutar de la peculiar paz de un parque urbano son actividades que conducen a un único desenlace feliz, la degustación pausada de un cocido tradicional elaborado a fuego lento y servido en tres vuelcos con toda su liturgia.
Feliz paseo y buen provecho.